El Rol de los Padres
Con ya nueve años de experiencia en este arduo trabajo de 24horas y con otros tantos de tener el privilegio de tomar el rol de papá con otros chicos, debo decir que ser padre es uno de los regalos más maravillosos que Dios me ha permitido experimentar. Es un sin fin de experiencias tan radicales que todos los días me hacen caminar desde un estado emocional apacible y lleno de paz hasta -y mientras lo escribo he soltado una gran carcajada- el totalmente opuesto sentimiento de desesperación y urgencia de salir corriendo; y así mismo, el solo mirarlos me hace regresar la paz y el deseo de abrazarlos y no volverlos a soltar. Creo que tu me entiendes.
Una noticia que tu ya sabes es que ser papá no es una tarea fácil, y mucho menos ser papá y Pastor al mismo tiempo, tal y como muchos de ustedes, lectores de esta revista, tienen como labor diaria en su vida e Iglesia.
Y aunque la mayoría de las veces somos nosotros mismos los últimos en darnos cuenta que estamos haciendo algo mal respecto a la formación de nuestros hijos, quiero invitarte a que puedas detenerte unos segundos a reflexionar en algunas recomendaciones que te ayudarán, créeme, ha sido una enorme bendición el ponerlas en práctica.
1. Pasa más tiempo con ellos. Y cuando digo pasa más tiempo es pasa mucho tiempo con ellos, procura estar físicamente en la mayoría de ocasiones posibles. Tutrabajonotelopuedeimpedir, recuerda que el proveedor no eres tu, sino Dios. Al final del día, no hay mejor paga que la de sus abrazos. Tu fe también los hará crecer.
2. Confía en lo que ya hiciste con tus hijos. Déjalos cometer sus errores. Tal ves tu dices: mis hijos ya están grandes y no puedo hacer nada ahora. Sin embargo, recuerda que Dios es Señor de ayer, de hoy y de mañana, así que mientras tu estés en sus caminos, verás su promesa cumplida: “Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos” Hechos 2:39
3. Un padre está presente cuando pone el cuerpo en la relación con sus hijos. Abrázalos, bésalos, cárgalos, que se recarguen en ti. Ellos sabrán que no necesitan de nadie más, pues tu les suples toda su necesidad de afecto. Recuerda esto, si tú no lo haces, alguien más lo hará.
4. Y por último Menos “Religión” y más Cristo. Quieras o no, los tiempos han cambiando, y nuestros hijos entiendes a Dios de una manera diferente a nosotros, ellos no necesitan grandes sermones o disciplinas religiosas para comprender a Cristo. Procura ser menos religioso en tu hablar, en tu comportar y en tu amor. Dios los guiará siempre en su camino.
Le pido al Señor que bendiga a tu familia, y que te permita disfrutar de tus hijos por largos años.
Te mando un abrazo.
Ricardo Vázquez
Padre de unos hermosos hijos.
Director General de Colegio Doxa.
Fundador del Modelo Educativo “MED”.
Coordinador General de Expo Educación Cristiana.
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